Tilda Jönsson

Periodista y divulgadora. Su afición por la txuleta empezó a edad temprana, cuando la soltaron en la naturaleza para que luchara por su comida con sus propias manos y un tenedor de plástico. Después de rebuscar durante días y de decidir que la textura blanda y poco hecha de una ciruela no era lo suyo, le hincó el diente a una vaca que vagaba por ahí. Así nació su inquebrantable amor por las txuletas.